BURGOS.
Tal vez lo más sorprendente del trabajo de Fernando García (Madrid, 1975) sea su capacidad para construir (y para sugerir) lugares. Lo llamativo es que no se trata en rigor de erigir una instalación, sino de crear espacios para la contemplación; ámbitos, en suma, para la calma. Antes que espacios físicos, son lugares mentales construidos con contención, equilibrados y delicadamente irónicos. No en vano son resultado de la experiencia vital del artista, fruto de sus diferentes traslados, asentamientos y mudanzas entre ciudades de España y Europa.
En los últimos quince años, apunta Ángel Calvo Ulloa (quien ha comisariado este proyecto para el CAB), Fernando García ha conformado un archivo fotográfico, un registro sistemático de su actividad que incluye las obras presentadas al público, las decenas de proyectos no realizados y también, de manera relevante, los lugares en los que obras y proyectos cobraron forma. A la par fotografió también las tumbas y los entornos de los estudios de artistas (como Jackson Pollock, Mark Rothko, Manolo Millares, Juan Muñoz, Joan Miró o Leonard Cohen) en cuyos aledaños recogió diferentes objetos con los que materializó algunas de las piezas definitorias de su trabajo. Son obras que evocan lugares a través de la presencia de los artistas que tuvieron que ver con ellos, como hiciera en su momento como Joan Miró y ahora con Antoni Tàpies.
La propuesta creada específicamente para el CAB, Interiores, parte precisamente de sus excursiones por Campins, en la ladera oriental del Montseny, donde se radicaba el estudio de Tàpies. Allí Fernando García realizó una serie de acciones con telas en las que incorpora la fuerte carga emocional del entorno que lo acoge. No hay un interés estrictamente plástico por el resultado, sino telúrico y espiritual, una búsqueda de la mímesis entre uno y otro artista desde el ritual y la ofrenda.
Junto al trabajo sobre los lienzos Interiores se completa con esculturas, pinturas o vídeos que remarcan la noción de tiempo pasado, en un catálogo de propuestas que se han ido acumulando al paso del artista por los diferentes lugares en que ha residido y trabajado.
La exposición puede visitarse hasta 23 de septiembre de 2018 en Centro de Arte Caja de Burgos. Saldaña s/n . 09003. Burgos. 
Fotos: Centro de Arte Caja de Burgos.
