POP-UP STORE.
H&M nos propone este verano que nos vayamos de compra a la playa. La tienda fue instalada durante dos días en la playa de Scheveningen, en Holanda.
La compañia sueca ofreció a los bañistas productos para que fueran utilizados de forma inmediata. La colección que se vendió estaba compuesta por sombreros, bikinis, pantalones cortos y sandalias. También se vendieron otros objetos como sillas de playa y sombrillas. La colección utilizó los tonos azules inspirándose en el color del agua.
El 25% de los ingresos fueron donados a la organización WaterAid. De esta manera, H&M pone la atención en la necesidad básica de agua potable y saneamiento, para los países más pobres del mundo.
FOTOS: Jonathan Loek @ Team Peter Stigter